Hoy 14 de junio, día nacional de
Lucha de la CTA, se llevó adelante la caminata de la dignidad en la que
participaron más de 400 vecinos, de las barriadas más pobres, que se hicieron
presentes desde muy temprano en la plaza San Martín para comenzar el trayecto
que va de dicha plaza a la plaza central. Esta caminata se enmarca en la
jornada nacional de lucha que se desarrolló este 14 de junio a lo largo y ancho
del país para pedir la emergencia social, mejores condiciones de trabajo, y
exigirle a los gobiernos nacionales, provinciales y municipales se declare la
emergencia social para aumentar los presupuestos en las áreas más vulnerables,
ya que la situación económica en nuestro país está llevando a que aumenten los índices
de indigencia y pobreza. En un marco de armonía y color, los vecinos
emprendieron la caminata desde la Plaza San Martín con bombos, banderas y
colores, con presencia de los niños que asisten a los más de seis centros
comunitarios y copas de leche que tanto la CTA como el MAP (Movimiento de
Acción Popular) tienen en el territorio. El objetivo fue visibilizar la
importancia de la niñez, no pensando a futuro, sino que ellos son nuestro
presente y merecen una vida digna, para eso es necesario que no solo sus padres
cuenten con trabajo genuino, también poder satisfacer las necesidades básicas.
Barrios como: Valacco, Hipódromo, Saltos de Malvinas, Islas Malvinas, Alberdi,
400 viviendas, Avenida Argentina, entre otros estuvieron allí manifestándose para
que el Ejecutivo municipal declare la emergencia y tome cartas en el asunto
para revertir la situación actual, donde hubo casos de niños con índices de
desnutrición y el aumento del índice de pobreza, desigualdad e indigencia. Al
comenzar la caminata el Padre Carlos Juncos con el Pastor Ariel Vegas la
bendijeron y luego acompañaron la movilización por las calles de nuestra
ciudad, aclarando que es necesario tener
un rápido accionar en la cuestión social de nuestra ciudad que tanto
afecta a la niñez y adolescencia. El cierre se dio a puro color y pura mística,
con la murga de los retumbones desbocaos, con música popular y artistas
locales, y con el Colectivo Cultural de Unidos por Río Cuarto que realizaron
actividades recreativas con los niños. Al final hubo un almuerzo comunitario,
con un guiso que coronó una jornada de lucha y militancia.
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