El año pasado, Raúl Zibechi pasó por Río Cuarto, provincia de
Córdoba. Julia Giuliani, periodista, militante, y viajera frecuente por
América Latina y el Caribe, habló con él sobre “cómo el sistema utiliza
la pobreza para dominar y establecer un nuevo modelo de dominación
hacia los más pobres”.
Julia Giuliani en Guatemala
Giuliani comparte con nosotros la nota final y el audio de ese encuentro. Aquí queda, para, como invita a hacer la autora,
reflexionemos juntos.
-
En tu libro Territorio en Resistencia, hablás un poco de la resistencia de los de “abajo”, ¿a qué te referís cuándo hablas de eso?
Me refiero sobre todo a las resistencias urbanas, aunque también hay
rurales en las periferias de las ciudades. Lo que hemos visto hoy en tu
barrio y en otros lugares, o sea, cómo los sectores populares en los
barrios más pobres de todas las ciudades de América Latina se organizan
¿quiénes?, aquellos, sobre todos que no tienen “cabida” en el modelo
actual, las víctimas del modelo actual, los que tienen un empleo
precario, o empleos muy mal pagos, en un modelo como el actual, los que
no tienen futuro, o sea las periferias urbanas, que se organizan para,
inicialmente, resolver los problemas que no les resuelve el sistema. La
educación, la alimentación, las tareas de los niños, el cuidado de los
niños, incluso la vestimenta, un montón de necesidades que después de 10
años de crecimiento económico impresionante, al 7%, el sistema
adicional venimos creciendo al 7%, pese a 10 años de ése crecimiento
brutal, una parte fundamental de la población, no tiene los problemas
elementales resueltos; y ya saben que no se los va a resolver el Estado,
ni el mercado. Las políticas sociales llegan a ellos en cuenta gotas,
tienen una educación de “cuarta”, una salud también de “cuarta”, o sea,
ya está instalado que ésa es la vida para ellos, y ellos no quieren ésa
vida, cómo no la quiere nadie, entonces empiezan a organizarse.
Primero, para resolver éstos problemas, y en una segunda instancia
para avanzar un poco más, no sólo para resolver lo elemental, o sea para
poner “parches”, vos decís: estás poniendo “parches” al agujero del
sistema educativo, ése es el primer paso; el segundo paso, es ya, ir
construyendo un proyecto popular, una organización popular de carácter
político, o sea, nacida en la vida cotidiana y politizando en la vida
cotidiana, ¿verdad?, discutiendo sobre porqué nuestra educación es un
“desastre” cómo es, o ¿por qué la salud a la que tenemos acceso es así?,
y a partir de ahí, resistir, y en la medida que haya fuerza, pasar a la
ofensiva, ése es el objetivo; en algunos lugares se ha podido, en otros
más, en otros menos, pero en eso estamos.
-¿Vos cuando hablás de territorio hablás específicamente del barrio?
Territorios urbano o, puede ser el caso de “los sin tierras”, de los
campesinos (del Movimiento Nacional Campesino Indígena de territorios
rurales). Le llamo territorio, amplio el término, no sólo el barrio en
realidad, se puede extender a varias “cosas”. En realidad lo que hay es
una disputa territorial, entre el capital y los “de abajo”, el capital
va creciendo, haciendo sus edificios, haciendo sus plantaciones de soja,
y “los de abajo” son expulsados y se van; entonces es el barrio, pero
no sólo el barrio.
-¿Por qué decidiste indagar sobre la periferia latinoamericana?, ¿qué es lo que te motivó?
Me motivó el comprobar que han surgido de ésos sectores, el
“argentinazo” del 2001 vino de ahí, el “chavismo” surgió de ahí, la
resistencia del pueblo paraguayo , y del ecuatoriano, y en todas partes,
hoy en Chile, el movimiento estudiantil, dónde realmente tiene un
“arraigo” fuerte es en las periferias urbanas. Y yo, lo que compruebo,
es que la lucha social y la organización social hoy tiene un “arraigo”
fuerte en las periferias urbanas, no se puede entender la persistencia
del “chavismo”, por poner un ejemplo, sin entender la fuerza que tienen
los “cerros”.
-“Política y miseria”, ¿bajo qué sentido usas el concepto de miseria?
Bueno, ése es el título, ¿no?, en realidad no lo puse yo, porque yo
le había puesto otro título, pero viste siempre las editoriales (…). El
sentido es, en
cómo el sistema utiliza la pobreza para dominar, para establecer un nuevo modelo de dominación hacia los más pobres,
entonces lo que trato, es de explicar cómo las políticas sociales, que
hoy son territoriales, para responder a un desafío territorial de los
“de abajo”, utilizan la pobreza o la miseria cómo herramienta para
“domesticar”; aunque lo encontremos en las políticas sociales para
revertir ésa situación.
¿Qué alternativa a la sociedad capitalista creés es posible?
La sociedad capitalista no brinda ninguna alternativa, yo creo que el
sistema capitalista, (ése 1% de la humanidad que domina) tiene por
objetivo acumular capital eternamente y, si es posible, erradicar a los
“de abajo”. Hay que tener claro eso, tenemos que tener clarísimo:
políticas sociales son “parches” para que no haya un cuestionamiento
estructural del sistema, para que continúe la soja, continúe la minería,
y todo esto. Entonces nosotros necesitamos comprender qué planes tienen
los “de arriba”, por eso éste libro, desentrañar esos planes, y yo
pienso que esos planes son el exterminio activo o pasivo, cuando digo
pasivo, digo: dejarnos morir de enfermedades, de hambre, de cáncer, y no
les importa; porque ellos saben lo que está pasando, lo saben
perfectamente pero no les importa ni difundirlo, para que la gente
reaccione, ni cambiar nada del modelo.
-Y en éste marco, ¿qué rol tienen los gobiernos progresistas cómo Ecuador, Venezuela, Bolivia?
Yo planteo que hay varios tipos de gobiernos progresistas, uno es
Argentina- Brasil, Uruguay- Chile, tal vez Paraguay, Chile antes, y el
de Perú sin duda, el de Ollanta Humala son gobiernos, que no tienen el
menor cuestionamiento del modelo vigente, que no tienen el menor interés
en cuestionar la soja, la minería, y que su único objetivo, y esto
parece muy duro de decir, es “aplacar” a los de abajo para que los “de
arriba” sigan acumulando, eso es lo que yo pienso. En el caso de otra
genealogía que mencionás vos, Venezuela, Ecuador y Bolivia, ahí hay una
situación distinta, porque los movimientos populares tienen una fuerza
importante y han llevado a éstos gobiernos, han promovido éstos
gobiernos. Aún así hay una crisis ahí porque el capital hace su juego y
ha ido “acorralando” a muchos gobiernos, o los ha convencido, (como en
el caso de Correa) de que el extractivismo es lo bueno; los movimientos
populares en esos países tienen fuerza, y tienen capacidad de
“presionar”.
*Ser revolucionario hoy en Latinoamérica, ¿qué es?
Para mí hoy ser revolucionario es: trabajar junto a los de más “abajo”, a
las periferias urbanas, o como le quieran llamar, campesinos,
indígenas, a los pobres, verdaderamente afectados por el modelo que hoy
están totalmente aislados, (ésas son las cosas que hay que decirlas)
trabajar junto a ellos para crear organización popular para revertir
ésta situación.
*La realidad uruguaya, va un poco por ahí, llegan noticias y a veces uno
idolatra y se referencia con “Pepe”, pero los que están “arriba”, por
ahí vemos que hay otras realidades, otras “cosas” que suceden.
“Pepe” es un personaje muy interesante, porque es un personaje que surge
“de abajo”, que estuvo muchos años preso, que estuvo en una situación
muy difícil, fue un “guerrillero”, un “luchador” social y es hoy es
Presidente; y mantiene sobre todo en las formas, un estilo distinto al
de otros presidentes. Pero acá no hay un problema de personas, “Pepe”
puede ser un tipo maravilloso como lo es Lula, lo que pasa es que hay un
modelo y los gobiernos nuestros, (Uruguay, Argentina, Brasil) tienen un
problema básico, para tener ingresos suficientes para un mínimo de
salud, un mínimo de educación, necesitan de la soja, necesitan de la
minería, entonces ése es el problema del modelo. Que esté “Pepe” está
bárbaro, yo me llevo muy bien con él, pero en el fondo, no está
cuestionando el modelo, y ése es el punto que parece que hay que tener
claro.
-Y por último, quería saber si tenías idea del proceso hacia
una Constituyente Social que se está desarrollando en Argentina, que lo
están tomando algunas organizaciones sociales...
He escuchado hablar, la CTA siempre es una referencia para nosotros,
los que estamos “luchando”, que demuestra que puede haber un movimiento
sindical, que no sea corrupto, que no esté “vendida” al poder, siendo
crítico, muestra que lo territorial, no sólo sindical, que es necesario,
que se pueden “tocar” los temas que normalmente el sindicato no “toca”.
Una iniciativa como la de la constituyente, más allá de algunas cosas
que desconozco, me parece que es interesante en la medida que busca
ampliar el horizonte del trabajo puntual en cada sector para darle una
vertiente más política, más de incidencia en la realidad política. A mi
me parece que todo lo que sea organizar, movilizar, interconectar, en el
caso de la constituyente, diferentes experiencias de la resistencia es
muy valioso. Hoy, por decirlo de alguna manera, lo que yo siento, es que
la Constituyente es la marcha federal del período actual, ¿la “marcha
federal” que hizo en los ´90 cuando estaba todo destrozado por el
“menemismo” y por la dictadura?, ir tejiendo las diferentes resistencias
para confluirlas en una marcha hacia Buenos Aires; de alguna manera yo
siento un vínculo entre lo que es la Constituyente y lo que fue la
“marcha federal”. Me parece que eso muestra que la CTA tiene una
coherencia, tiene una voluntad de ir hacia amplificar las resistencias y
darles un cauce y un futuro determinado.
- Julia Giuliani es además Secretaria de Prensa y Comunicación de la CTA Río Cuarto.